España es el principal socio comercial de Marruecos en los últimos años, así lo atestigua la Embajada española en Rabat, un vínculo comercial impulsado de forma significativa por el crecimiento de la industria de la automoción en Marruecos. Pero, ¿qué importancia tiene este crecimiento para el sector en España? Empresas como Renault y Seat ya han sabido aprovechar la oportunidad. En este articulo analizamos la situación de Marruecos en el sector automovilístico, explicamos cómo son sus relaciones comerciales en España y qué futuro le espera a la automoción española teniendo en cuenta estos factores. ¡Arrancamos!
Marruecos, potencia emergente del sector automovilístico
Para entender las relaciones comerciales del sector de la automoción entre España y Marruecos, es fundamental dejar clara la posición del país africano en lo que se refiere a la fabricación de vehículos.
Bien, conviene destacar que Marruecos ha experimentado un crecimiento potencial en el sector automovilístico, otorgándole el 30º puesto del raking mundial de países productores de coches, según la Organización Internacional de Fabricantes de Automóviles. Pero, no es la única muestra de que estamos ante una potencia emergente en el sector: Marruecos es el segundo mayor productor de vehículos del continente africano, solo por detrás de Sudáfrica y superando a países como Egipto. Además, ha marcado hitos importantes, como la producción de su primer vehículo nacional en 2023 y la presentación de un prototipo de vehículo de hidrógeno. Y, está previsto que antes de 2030, Marruecos se convierta en el mayor fabricante africano de vehículos.
El impacto económico es significativo. Según los últimos datos de la Oficina de Cambio de Marruecos, el sector automotriz contribuyó con 12,700 millones de euros a la economía. Este dato cobra mayor relevancia al compararlo con otras grandes industrias. Las exportaciones del sector experimentaron un crecimiento superior al 30% en 2023, un aumento que se debe principalmente a la exportación de componentes para la construcción de vehículos, lo que ha incrementado el valor añadido de la industria.
¿A qué se debe el éxito de Marruecos en el sector de la automoción?
Es indudable que Marruecos ha aumentado la capacidad de producir vehículos de combustión, cómo también lo logró con la importación de las frutas, un logro que se ha potenciado con la apuesta por la electrificación.
Fábricas modernas, parques industriales, personal cualificado y un espíritu de trabajo incansable y una voluntad constante de cambio son los pilares sobre los que Marruecos está impulsando su producción anual de vehículos. El país ha logrado establecer un fuerte tejido empresarial que, alcanzando en el último año una capacidad de producción anual de 700.000 coches. Este crecimiento ha transformado al país en una capital árabe para la fabricación y ensamblaje de componentes automotrices, atrayendo inversiones significativas. Un ejemplo claro es la inyección de capital chino procedente de empresas como GOTION High-Tech y CNGR Advanced Materials desarrollando plantas para la fabricación de componentes para la construcción de baterías para los coches eléctricos.
¿El resultado? Marruecos se ha posicionado en una tecnología puntera de la automoción, gran fabricante de elementos clave para cubrir la demanda del sector automovilístico en países europeos.
España y Marruecos: la alianza actual en el sector automovilístico
Marruecos ha emergido como líder regional en la industria automotriz, superando a países como China, Japón e India para convertirse en el principal exportador del sector automovilístico para la Unión Europea. Según datos del ICEX, España es uno de los principales destinos de las exportaciones marroquíes en el sector automovilístico, junto a Francia, Italia, Alemania y Portugal. Por ejemplo, las empresas españolas del sector son grandes consumidoras de carrocerías de origen marroquí. Y, a su vez, España es el segundo proveedor de las importaciones de Marruecos vinculadas a maquinaria, equipo eléctrico y sus partes.
Estamos ante datos que nos hablan de una clara alianza entre España y Marruecos dentro del sector de la automoción, donde cada país le proporciona al otro lo necesario para la fabricación del producto que comercializa.
El ascenso de Marruecos como líder regional en la industria automotriz ha fortalecido aún más esta alianza, convirtiendo a Marruecos en un destino cada vez más atractivo para la inversión española.
La colaboración y cooperación entre ambos países ha impulsado el crecimiento económico en cada uno de ellos, fortaleciendo su asociación estratégica en el ámbito comercial y empresarial.
Marruecos al alza en fabricación de vehículos. ¿Cómo afectará al futuro de la automoción española?
La industria automovilística de Marruecos está en plena expansión, consolidando al país como un protagonista clave en la producción de vehículos y componentes en la región. Este ascenso ha llevado a que Marruecos no solo se convierta en el principal exportador de vehículos hacia Europa, sino que también marque un nuevo desafío para los fabricantes españoles, que ven con inquietud esta rápida evolución. No obstante, empresas como Renault y Stellantis han establecido grandes centros de producción en suelo marroquí, viendo el crecimiento como una oportunidad para beneficiarse de una mano de obra competitiva y de incentivos fiscales que han permitido a Marruecos alcanzar una producción anual cercana a los 700,000 vehículos, con miras a alcanzar el millón en los próximos años.
La competencia en costes y producción: ¿Una amenaza para España?
Uno de los factores que han impulsado el crecimiento marroquí es su capacidad para mantener unos costes de producción competitivos, que resultan difíciles de igualar para las fábricas en España. La proximidad geográfica, las zonas francas y la infraestructura industrial de Marruecos permiten a las empresas europeas reducir significativamente sus costes logísticos, favoreciendo la exportación de componentes y vehículos hacia Europa. Frente a este panorama, las fábricas en España podrían verse obligadas a adaptar sus estrategias y fortalecer sus áreas de especialización, como la producción de vehículos eléctricos, para mantenerse en el mercado.
Con las expectativas de crecimiento de la industria automotriz marroquí, que prevé superar los 85 mil millones de euros en exportaciones anuales para 2027, es probable que España y Marruecos intensifiquen su relación comercial, pero también compitan en el terreno de la automoción. La respuesta española podría pasar por innovar en áreas donde todavía mantiene ventaja, como la tecnología de propulsión sostenible, para seguir siendo un referente en el mercado europeo.
